Los cocaleros en camino
Desde la dimisión del Presidente, estos jóvenes han hecho de la protección de su ciudad su misión. Este miércoles por la noche, recibieron refuerzos de la capital económica Santa Cruz. Su objetivo: impedir que los partidarios del ex presidente organicen un gran mitin en Cochabamba para exigir el regreso de su líder. Esperan sobre todo a los productores de hoja de coca del cercano Chapare.
“Si vienen los cocaleros, si llegamos a la confrontación, se enfrentarán a la policía, a los militares, y seguiremos atentos y sabemos que no lograrán entrar”, dice Milena Soto, una de las representantes de la Resistencia Juvenil de Cochala. Sabemos que no van a llegar a la ciudad. “En el caso extremo de que lograran ingresar a la ciudad de Cochabamba, a la primera advertencia nos organizaremos como grupo y vamos a salir a las calles nuevamente para defender a nuestro pueblo, a nuestros vecinos, a los ciudadanos, y tratar de bloquear un poco sus intentos de agresión”, asegura.
“Tenemos videos, imágenes que muestran que están armando al pueblo de El Chapare. Si entran en la ciudad, habrá una batalla sangrienta. Porque la policía, esta vez, no va a reprimir con gases. Puede convertirse en un día sangriento. Lo que queremos es que eso no suceda”, recalca Milena Soto.
El ejército, que el domingo le había dado la espalda a Evo Morales, planea bloquear dos caminos de acceso a la ciudad. Los habitantes de Cochabamba, que en su mayoría sueñan con volver a la normalidad después de tres semanas de protestas y violencia, se están preparando una vez más para quedarse en casa.
Una calma precaria
En el resto de la ciudad, la Plaza del 14 de septiembre, prácticamente desierta estos últimos días, volvió el miércoles con su animación y palomas que Daniel y su familia vinieron a alimentar. “Todos los cochabambinos estamos alegres de que ya esté normalizando todo poco a poco. La ciudad está un poco silenciosa, abandonada y destrozada. Mucha gente se ha visto perjudicada. Llevamos casi 21 días de no poder salir de nuestras casas”, dice.
Junto a ellos, con paquetes de semillas para las palomas a sus pies, Arminda Coliorana celebra que finalmente vuelve a ver a sus clientes. “No había gente por el temor a los conflictos. Ahora que las cosas se han calmado, hay un poco más de ventas en la plaza”, dice.
Un poco más arriba de la Avenida Prado, Carlos Miranda abrió tímidamente la persiana de su almacén. “La situación en Cochabamba sigue siendo un poco inestable”, explica. “El otro grupo [los partidarios de Evo Morales] está muy resentido, muy dolido. No deja llegar a esta pacificación que todos estamos buscando para trabajar y hacer una actividad normal.
dejan que las cosas se calmen, como todos esperamos, para volver al trabajo, para tener una actividad comercial normal. “Carlos Miranda ya sabe que no trabajará este jueves por temor a nuevo enfrentamientos: una confederación campesina ha hecho un llamamiento a nuevas movilizaciones para exigir el regreso al país del ex presidente Evo Morales.