Pronóstico complicado
Escrito por Jorge Cabrera el 10 abril, 2019
Un lastre. Así califica el Fondo Monetario Internacional a Venezuela cuando se trata de medir el crecimiento económico de la región. Y no es para menos, los números del país caribeño son terribles: una hiperinflación sin precedentes de 10.000.000% para este año, una caída económica proyectada en 25% para 2019 y un 10% para el 2020. El informe World Economy Outlook (WEO) emitido este martes por el FMI recortó su previsión de crecimiento para América Latina a 1,4% en 2019 y a 2,4% en 2020; 0,6 y 0,1 puntos menos respectivamente que las estimaciones actualizadas de enero. Además, redujo las expectativas de crecimiento para este año de Brasil y México, las dos mayores economías regionales.
Para el economista venezolano, Luis Oliveros, el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial deberían medir los índices de América Latina sin incluir a Venezuela. Veinte años después de la llegada a la presidencia de Hugo Chávez, fallecido en 2013, Venezuela, el país con las mayores reservas probadas de petróleo del mundo, está sumida en una colosal crisis económica marcada por hiperinflación, escasez de alimentos y medicinas, colapsos en el suministro de agua y electricidad y una producción de crudo que cayó a la mitad desde 2014. “En este punto se hace muy difícil hacer previsiones para Venezuela, por la crisis humanitaria, de alimentos y de medicinas”, explicó Oya Celasun, director del Departamento de Investigación del FMI.
Brasil y México, los motores de la economía latinoamericana
Con relación a estos dos países, el FMI destacó variaciones con relación a sus proyecciones del WEO de octubre. “Estos cambios, en parte, reflejan alteraciones en las percepciones sobre la conducción de las políticas en las nuevas administraciones en ambos países”, señaló el WEO. En Brasil, que se recupera de una dura recesión entre 2015 y 2016 y donde el 1 de enero asumió la presidencia el ultraderechista Jair Bolsonaro, el Fondo estimó un fortalecimiento del crecimiento, de 1,1% en 2018 a 2,1% en 2019 y 2,5% en 2020.
Pero para México, gobernado desde el 1 de diciembre por el izquierdista Andrés Manuel López Obrador, el FMI dijo que la expansión se mantendrá por debajo del 2% en 2019 y 2020, una reducción cercana a un punto porcentual para ambos años con respecto al WEO de octubre. “Claramente México también ha sido afectado en los últimos años por las tensiones comerciales con Estados Unidos”, añadió Gian Maria Milesi-Ferretti, subdirector del Departamento de Investigación del FMI.
Argentina saldría de la situación comprometida
A pesar de rebajar el crecimiento para América Latina y el Caribe en 2019 y 2020, el FMI mostró cierto optimismo, en parte por el “moderado” desempeño de Brasil y México, pero más que nada por la “estabilización financiera y la recuperación” que espera para Argentina, tercera economía de la región. El FMI es auspicioso con el país, al que auxilió el año pasado con un crédito de 56.000 millones de dólares para enfrentar la crisis financiera y cambiaria. Ese monto es récord para la institución que, a cambio, acordó con el gobierno de Mauricio Macri un severo ajuste fiscal.
En su informe de abril, el Fondo dijo que Argentina se contraerá en el primer semestre de 2019 “a medida que la demanda interna se desacelera con políticas más estrictas para reducir los desequilibrios”. Y previó que el país volverá a crecer en el segundo semestre del año en tanto el ingreso real se recupera y la producción agrícola repunta después de la sequía de 2018. El PBI se contraerá 1,2% en 2019, para expandirse a 2,2% en 2020, dijo el Fondo.
El WEO de abril también es positivo con relación a la inflación, el talón de Aquiles que el gobierno de Macri espera contener con un déficit fiscal cero para este año. En términos de proyección anual, el FMI estimó una tasa inflacionaria de 30,5% en 2019 y de 21,2% en 2020, en baja del 47,6% de 2018.
Con RFI.