Es como cuando “uno mete la pizza en el horno”, resume el director técnico del atletismo francés, Patrice Gergès. Hasta los atletas antillanos de la delegación gala se mostraban extrañados al ver las manos húmedas al salir del aeropuerto, afirmando que estas condiciones no tenían nada que ver con las que conocían hasta entonces.
“Someter a los deportistas a condiciones de calor y humedad tan extremas es algo que nunca se había visto en mundiales de atletismo ni en ninguna otra competencia”, se alarma el médico de la delegación francesa Jean-Michel Serra.
La temperatura será muy distinta según la disciplina. El Khalifa Stadium, por ejemplo, está completamente climatizado, y debería hacer entre 23 y 25 grados en el recinto. Sin embargo, la experiencia de quienes compitan en el exterior será muy distinta, sobre todo para quienes se sometan a los 50 kilómetros marcha o la maratón. El pistoletazo de largada está previsto para la medianoche para evitar el bochorno diurno.