45 años después

Nueve exmilitares fueron condenados por la muerte del cantautor chileno Víctor Jara, ocurrida en septiembre de 1973, poco después del golpe de Estado de Augusto Pinochet.

Su familia esperó 45 años para que fueran condenados los militares chilenos responsables de estas atrocidades. Según los peritajes llevados a cabo tras una exhumación del cuerpo en 2009, Víctor Jara pereció por 44 impactos de balas y tortura. Ocho oficiales del ejército hoy en retiro fueron condenados a entre 15 y 18 años de cárcel por homicidios y un oficial más, Rolando Melo Silva, fue sentenciado a 5 años por encubrimiento de los asesinatos de Jara y Quiroga.

Tras un largo proceso, la justicia chilena ordenó también al Estado indemnizar a las familias de las dos víctimas por un total de 2.100.000 dólares. El abogado de las fuerzas armadas Raúl Meza estima que el fallo es tardío y que al reconstruir hechos acontecido hace casi 45 años, éstos carecen de verdad jurídica. En cambio, Alicia Lira, presidenta de la Agrupación de Familiares de Ejecutados Políticos (AFEP) de Chile valora estas condenas.

RFI